El bogavante o lubigante, cuyo nombre científico es Homarus gammarus, pues se trata de un crustáceo decápodo oceánico, muy análogo a la langosta, que puede conseguir un tamaño de sesenta centímetros de extensión. Es un familiar cercano de la langosta americana y también de la cigala, y más apartadamente de lo que es la langosta.
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El bogovante : Descripción
Algunas de las características descriptivas de el bogovante , son:
1. Patas
El bogovante tiene cinco pares de patas, las cuales se distribuyen de la siguiente manera: cuatro están ubicadas en el tórax y, no obstante, son muy pequeñas en relación con su organismo, son aptos de suministrarle el movimiento. En este sentido, el primer par de patas, al contrario, acaba en dos magnas pinzas, una de ellas con las orillas afinadas, que maneja para trozar, y la otra con dinámicos dientes que usa para desmenuzar. Asimismo tiene además, saliendo de su cabeza, dos extensas antenas y otras dos más diminutas.
2. Color
La diversidad europea, es decir, la Homarus gammarus y también la variedad americana que es la Homarus americanus. En este sentido, se diferencian notoriamente por su coloración, siendo éste negro azulado con una que otras manchas claras en el caso de la variedad europea y rojiza en la americana.
Del mismo modo, se diversifican por su exuberancia. De hecho, gran parte de los que se hallan en los mercados para la ingesta humana provienen del océano Atlántico occidental, ya que el género europeo es mucho más insuficiente.
3. Localización
En torno a lo expuesto, el bogovante reside en el este del Océano Atlántico, específicamente desde las Islas Lofoten, en el noroeste de Noruega hasta la región de Azores y Marruecos. De la misma manera, puede ser hallado en algunas zonas del Mar Mediterráneo y también en el noroeste del Mar Negro.
Por otro lado, el bogavante elige los mares fríos, al inverso de la langosta cuyo sitio de reparto se ensancha más al sur. La región del bogavante es muy extensa, sobre la casi-totalidad de las playas norte-atlántico, en el caso del continente europeo, como del lado estadounidense. El bogavante vive bajo la zona infra-litoral (al límite de las zonas descubrimientos de las grandes mareas, bajo peñascos) , hasta aproximadamente 50 y excepcionalmente 60 metros de profundidad.60 metros
4. Procedencia y categorización
Gracias a su cubierta dura, pero elástica el bogavante ha sido catalogado como crustáceo. En este sentido, el seudónimo de su sub-clase Malacostraca simboliza que su exoesqueleto es más flexible que otros moluscos que poseen una cápsula a veces muy compacta pero siempre frágil.
El bogavante mora en amparos rocosos y es rara vez ubicarlo en depresiones mayores que 50 metros, pero puede vivir desde la marca de bajamar hasta los 150 metros de hondura y destacadamente en lechos de arena y pedazos de piedra.
5. Es nocturno
El bogovante es un animal típicamente nocturno, es decir, sale de noche a buscar nutrimento, que se acomoda a bases de gusanos, moluscos y peces muertos.
6. Reproducción
Una hembra bogovante coloca alrededor de unos 100 000 huevos durante su vida, en otras palabras, hasta una cincuentena de años para los modelos mayores, ocasionalmente hallados. En este sentido, el bogovante incuba bajo su abdomen a sus huevos durante muchos meses antes su aparición. Muchas hembras son atrapadas jóvenes, consecuencia por la aún no han puesto muchos huevos y se han propagado poco.
Diferencias entre el bogovante y la langosta
El bogavante se diferencia sencillamente de la langosta por la representación de pinzas majestuosas y por una cubierta menos espinosa. Los cangrejos, que vitoreen en aguas dulces, son las variedades que más se asemejan, pero más chicas (sin embargo, hay en regiones tropicales cangrejos suficiente magnos que pueden rememorar el tono y la representación de un bogavante joven).
Es una variedad que se está volviendo anómala, tal vez debido a una sobreexplotación de su captura y del contagio marino.
Especies
El bogavante es un crustáceo que se localiza en el mar. El género Homarus presenta tres variedades de especies, estas son:
El bogavante europeo
Citado en Francia, bogavante bretón, cuyo nombre científico es Homarus gammarus, fue descubierto por Linnaeus, en el año 1758. Asimismo, es de tonalidad color azul violáceo con manchas más claras, es el más estimado por los gourmets. Se captura sustancialmente en Inglaterra y en Noruega. El bogavante bretón, muy insuficiente en la actualidad, forma parte de esta clase.
El bogavante americano
Exclamado de igual forma como bogavante canadiense o Homarus americanus, su explorador fue H. Milne Edwards, en el año 1837. En este orden de ideas, es el más normal. Se caza en la costa de Canadá y en los Estados Unidos de América, específicamente en Massachusetts. Es de color verde oscuro, casi marrón, tiene patas casi llanas.
El bogavante de África o del Cabo
Esta es una especie menos conocida y más chica que las otras dos, el bogavante del Cabo, presenta un color marrón, es menos estimado que los otros ya que su carne es menos fina.
Conclusiones sobre el bogavante
Seguro que casi todos concebimos que un crustáceo es un animal bonito con un encantador tono rojo, pero cuando hacemos esto inmediatamente nuestra mente se nos va hacia una langosta.
No obstante, el color del animal cuando está vivo es de gama parda, marrón o azulada. Hasta hace poco se sabía que el malhechor de esa coloración roja aguda es la astaxantina, un caretonoide que se haya en la corteza, y más modernamente sabemos puntualmente por qué la langosta y el bogavante reemplazan su tonalidad cuando lo llevamos a la cocina.
La astaxantina
La astaxantina es un tinte liposoluble que en su representación libre goza de un tono rojo resplandeciente levemente anaranjado, el mismo que exhiben estos crustáceos una vez que los cocinamos. En cambio, los peces bovagantes están vivos, queda escondido por al interactuar con una proteína, la crustacianina, ocasional del tono marrón o azulado.
Cuando se cocina este ser animal, habitualmente sometiéndolo a altas temperaturas en el hervor en agua cociendo, la organización de la proteína se destroza, librando la astaxantina y exponiendo el tono rojizo natural. Los matices más apagados de los crustáceos vivos poseerían al mismo tiempo un empleo práctico, ya que los hace menos perceptibles frente a sus enemigos.
Esta investigación puede gozar muchas aplicaciones en distintos campos, tal y como apuntan los responsables del estudio llevado a cabo por la Universidad de Manchester publicado en el Physical Chemistry Chemical Physics. Por ejemplo, esta reacción podría emplearse como indicador en los tiempos de cocción de ciertos alimentos, o usarse como colorante alimentario. También es un descubrimiento valioso para exploraciones médicas.
Hay que determinar que cuando hablamos de langostas suele existir cierto desorden entre los crustáceos que consumimos. En realidad el crustáceo americano es más un familiar del bovagante, que sí muestra las mismas pinzas y el más característico tono oscuro cuando está vivo.
Asimismo, es importante destacar que la astaxantina se ha venido manejando hasta ahora sobre todo en la nutrición de ciertos animales, esencialmente peces, para desarrollar su tono rojizo, el salmón de piscifactoría es el ejemplo más frecuentado, normalmente en versión resumida, aunque del mismo modo como agregado antioxidante para humanos.
Como conclusión, no cabe duda que el bovagante es un animal sorprendente, curioso y no solo por su semblante y aspecto físico, sino también por cada una de las características que posee.